Calzada de Valdunciel (descripción en el libro de la provincia, Caja de Salamanca) |
Mun. con 659 hab. situado a 14 km al N de Salamanca en la ctra. N-630. Pertenece a la comarca de la Armuña, a la mancomunidad Comarca de Ledesma, P.J. y diócesis de Salamanca. 20 km2 de superficie en su término municipal llano, terreno de buena calidad para cereales y legumbres como la lenteja. La iglesia parroquial está dedicada a santa Elena, y conserva algunos capiteles en las columnas del coro como restos de su primitiva construcción románica. En el S. XVI se construyen la sacristía, la torre y el coro. En el S. XVIII se realiza la portada, el pórtico y el camarín de la capilla mayor. El retablo mayor es del S.XVIII, y cuenta con esculturas de santa Elena, san Pedro, san Juan y el Niño Jesús, pertenecientes a Simón Gavilán Tomé. El templo alberga la imagen del Cristo de la Piedad, un crucificado de tamaño natural datado entre el S. XV y XVI que cuenta con una gran devoción en el pueblo. A la salida de Calzada hacia Valdunciel se encuentra la Fuente Buena, una fuente romana recientemente reconstruida cubierta con bóveda de cañón y una estela romana en el pretil representando una figura femenina con un vaso en la mano izquierda.
Calzada de Valdunciel (otra ficha descriptiva)
Comarca: La Armuña
Situación geográfica: Limita al norte con Forfoleda y Valdunciel con quien también confina al este; al sur con Castellanos de Villiquera y Valverdón y al oeste con Forfoleda.
Distancia a Salamanca: 14 km.
Superficie: 20 km2
Altitud: 801 metros sobre el nivel del mar.
Población: 649 habitantes
Fiestas: 22 de mayo y 18 de agosto.
Entre amplios campos de cereal, salpicados de chalés y urbanizaciones que van modificando paulatinamente el paisaje originario, surge la localidad de Calzada de Valdunciel. Cruce de caminos cuyo topónimo alude al recorrido de la calzada romana de la Plata que discurría por la calle principal. Todavía permanece en la memoria de los más ancianos del lugar la ya desaparecida fuente romana, llamada Fuentebuena, que estaba compuesta por bóveda de medio punto con sillares que albergaba el manantial y una lápida sepulcral colocada como pretil en la que se veía el busto de una mujer. Como sucede en tantos otros municipios las edificaciones más antiguas de piedra y encalado van cediendo terreno a favor de otras en líneas más actuales. El monumento más sobresaliente es la parroquial, con huellas románicas del siglo XII en los capiteles. De la intervención efectuada en 1548 conserva la sacristía, el coro y la torre obras de Martín Navarro. En el siglo XVIII se realizaron algunas reformas como la portada levantada por Agustín de Vargas, el pórtico realizado según las trazas de Andrés García de Quiñones y el transparente y camarín de la capilla mayor, obra de Nicolás Requejo hacia 1736. También sobresale el retablo mayor con esculturas de Simón Gabilán Tompé. En la sacristía se expone una colección de lienzos barrocos, algunos obra de Antonio de Mora y Baraona.